PARA EL COMBATIENTE CAÍDO EN ACCIÓN DE ARMAS DE NUESTRA PATRIA AMADA PERÚ:

Existen superhéroes en la vida real todos los días se mueven entre nosotros listos para defender esta gran nación y a sus ciudadanos. Son esposos, padres, hermanos e hijos capaces de mirar la cara de la muerte y aun así volver el mismo día a acunar a sus bebes recién nacidos hasta que queden dormidos.
Pero esta clase de guerreros no se pueden fabricar o comprar, nacen para esto, bendecidos con el sentido más elevado de su propósito, y el conocimiento exacto de lo que les puede deparar el destino.
En la vida nunca pueden prepararte para ciertos acontecimientos, te cambian y sus consecuencias dan la vuelta a tu mundo. Ver el féretro de tu esposo cuando regresa por fin a su hogar, y la perspectiva de criar sola a sus hijos, vivir el resto de los días sin la única persona que te amó incondicionalmente. La verdad que estos hombres los que inmortalizaron sus nombres en el combate nunca defraudaron a nadie por eso que ya no están aquí.
Estos asombrosos guerreros decidieron pasar su breves pero increíbles vidas con nosotros. Criaremos a sus hijos los honraremos y recordaremos por siempre, vivimos en el presente y miraremos hacia el futuro. Ellos sabían que tendríamos la fuerza para continuar, ante la tragedia, y convertirnos en una versión más fuerte y asombrosa de nosotros mismos. Sabían que sus muertes inspirarían entre nosotros y haríamos valer cada segundo de nuestras vidas en recuerdo de los que cayeron para nunca más volver y que hoy descansan en la mansión de los héroes.
Una nación se caracteriza no solo por los hombres que crea sino también por aquellos a los que honra y recuerda.